Avram Iancu (1824-1872) fue el líder de la revolución rumana de 1848 de Transilvania, que logró resistir los ataques de Lajos Kossuth, el dirigente de las tropas revolucionarias húngaras.
En el año 1995 la obra del escultor Ilie Berindei, representando a Avram Iancu, ustuvo emplazada en el espacio entre la Catedral Ortodoxa y el edificio del Teatro Nacional y de la Ópera Rumana de Cluj. La estatua está hecha en broce, alzada en medio de un pozo artesiano, sobre un zócalo de bloques de piedra. Dichos bloques se apoyan en un conjunto de tres mujeres tocando el tulnic (antiguo instrumento de viento, semejante a la trompa de los Alpes); las mujeres de las Montañas Apuseni utilizaban dicho instrumento popular para realizar la comunicación entre las comunidades.